Estás que no puedes, se te ve, te lo dicen y tu también lo sientes. No te engañes, no puedes aguantar el nivel de trabajo que te pide tu jefe.
¿Ya desconectas? ¿Te sorprendes un sábado por la mañana pensando en adelantar trabajo? ¿Piensas en cómo puedes anticipar un problema que te va a lanzar tu jefe?
Se trata de una situación muy complicada, es tu jefe… Tu quieres quedar bien, el trabajo te gusta o te compensa (otro día entraremos en eso), pero tienes a un superior que no para de pedirte cosas, de inventarse problemas, de meterte presión en definitiva.
¿Y qué has hecho tú hasta ahora? Al principio no le dabas importancia, no te habías ni dado cuenta. Luego querías quedar bien, «es mi jefe, ¿cómo le voy a decir que no?». Luego, te viste en el círculo vicioso: Tu jefe es adicto al trabajo y quiere que tú lo seas…
Lee el artículo y podrás salir de esa dinámica negativa y nada productiva.