Siempre hay muchas formas o “trucos” para no gastar tanto, igual que siempre te aconsejo que te quedes con el que mejor se adapte a ti y tu forma de vida. Aquí te comentaré algunas claves para que tus finanzas acaben saneadas, dentro de lo posible, el verano.
Piensa cuánto te quieres (puedes) gastar
Sin duda es un punto clave en todo lo referente a las finanzas. Cuando comienza el verano la mejor idea que puedes tener es sentarte y pensar cuanto te quieres gastar o cuanto te puedes gastar. Si no, lo que pasará es que vivirás sobre la marcha y te pueden ocurrir dos cosas, que te gastes más de la cuenta o que se te acabé el dinero a mitad del verano. En esto es muy válida la frase de “a veces es más rentable dedicar dos horas a pensar sobre tus finanzas que una semana de trabajo”.
Planifica cómo te lo vas a gastar.
Obviamente, siempre pueden surgir gastos extras o imprevistos, pero planificar cómo te quieres gastar el dinero en tu verano o en tus vacaciones y comprometerte a cumplirlo te va a ayudar gastar menos. Al final, hacer caso o no a tus presupuestos va a depender de ti mismo, y del compromiso que tengas con lo que te propones.
Tienes que entender que cuando trazas un plan de actuación financiero, o del tipo que sea, que se cumpla o no, va a depender en gran parte de ti, no te hagas trampas al solitario, párate a pensar lo que es mejor para ti y actúa en consecuencia.
No pidas un crédito para las vacaciones.
Esto es una de las cosas más terribles financieramente que puedes hacer. Lo primero, si tú pides un crédito de 2.000€ para pagar unas vacaciones y acabas devolviendo 3.000€, las vacaciones te han costado 3.000€, no te engañes.
Además, cuando pides un crédito para irte de vacaciones, no sólo las encareces, si no que te estás añadiendo una obligación de pago. Si este año no has podido pagar unas vacaciones, el año que vienen menos, porque tendrás que estar pagando el crédito, ¿qué harás en ese momento? ¿Pedir otro? Si este año no te puedes permitir vivir el verano que te gustaría, empieza ya a ahorrar para que el año que viene si puedas. Esto lleva al punto siguiente.
Elige unas vacaciones acorde a tu presupuesto.
SI ya sabes cuánto te quieres gastar, cómo te lo quieres gastar y que no quieres pedir un crédito, lo que queda es elegir planes o viajes acorde a tus presupuestos y previsiones de gasto. Hay muchas formas de viajar y muchos destinos a los que ir, yo me he ido 21 días Tailandia gastando 1200€, y una semana a Benalmádena gastando 800€, adivina cuál estaba planificada con tiempo. Quiero decir que hay muchas formas de viajar y de hacer planes según el presupuesto.
Créate una cuenta o un bote de vacaciones.
Crea una cuenta, o usa una que ya tengas o un bote de dinero en efectivo, que tenga lo que te quieres gastar. Esa cuenta va a ser tu cuenta de uso diario, es la que usarás para todo. Así, con sólo mirar el saldo sabrás si estás cumpliendo tus objetivos o no. Y si se acaba antes de tiempo sabrás que algo no has hecho bien.
Cuidado con las tarjetas.
Si un día sólo quieres gastarte unos euros determinados, lleva eso en efectivo en la cartera, así cuando se gasten sabrás que te has pasado. Las tarjetas pueden ser peligrosas porque no dan percepción del gasto, ya que siempre haces el mismo gesto para pagar, y sin darte cuenta puedes gastar más de la cuenta. Sobre las tarjetas decir que recomiendo poner una alerta en el móvil que te diga siempre que se usa, por un lado si te la clonan lo sabrás y por otro te hará más consciente del gasto.
(Más claves: Cómo dejar de gastar )
Espero que con estos consejos acabes tu verano con tus finanzas en un estado óptimo. Pasar un buen verano también es no gastar más de la cuenta.